CARTA A LOS ESTUDIANTES DE CHILE

El año 2009 se presenta como un año en que el pueblo chileno tendrá una participación relevante en la instalación de sus demandas, tanto por el escenario de crisis mundial, con especial efecto sobre los niveles de cesantía, como por las elecciones presidenciales y parlamentarias de fin de año, que establecen un desafío para la clase política, la que debe responder a las necesidades de la sociedad.

      Los estudiantes de Chile debemos constituirnos como un actor relevante, con capacidad de discusión y diagnóstico de la realidad que viven nuestros compañeros a lo largo del país, independiente del tipo de educación e institución que hayan elegido continuar.

      Ningún estudiante debe abandonar sus estudios por razones ajenas a las académicas.

      La educación en Chile tiene problemas estructurales que se enfrentan con medidas estructurales, en este sentido, la conformación de un espacio de diálogo y coordinación con todos los estudiantes del país se hace necesario y urgente; el llamado es hacia aquellos que estudian en instituciones no tradicionales, técnicas superiores e institutos profesionales, a que nos organicemos en conjunto, discutamos los temas necesarios y fortalezcamos propuestas en el horizonte de una sola gran voz estudiantil.

      Sumado a lo anterior, valoramos los esfuerzos del Consorcio de Universidades Estatales de Chile, puesto que consideramos que exigir un Nuevo Trato con el Estado es parte de una política de educación superior que apunta en la dirección correcta en temas como calidad, equidad y por cierto en materia de financiamiento, en el marco del trato preferente que el país debe entregar a sus universidades, tal como lo expresa el informe del Consejo Asesor de la Presidencia para la Educación Superior.

    Esto es indicativo de que un Nuevo Trato del Estado con sus universidades es deseable y necesario. Pero creemos que el Estado debe sustentar el sistema completo de educación, permitiendo una relación especial con las Universidades Privadas que cumplan con un sentido público.

      Para la consecución de estos y otros objetivos, la movilización social de los Estudiantes de Chile resulta imprescindible, por esta razón es que el llamado a la organización, integración y movilización no es propiedad de la Confech, sino por el contrario, nuestro anhelo es que el espíritu de unidad se exprese en todas las instancias de representación que los estudiantes busquen para sus espacios, sean de la naturaleza que sean.

      Los llamamos e invitamos a hacer suyas las fechas, temáticas y características de la movilización, a emplazar a las autoridades de nuestro país a hacer propias las demandas del mundo social e instarlos a trabajar para avanzar en la dirección que los actores de la educación buscaremos y definiremos en un Congreso educativo que coloque en la palestra de las prioridades los puntos que Chile requiere para progresar como un cuerpo conjunto.

      La apertura de la discusión y temas fundamentales hacia la sociedad civil es un eje central en la conformación de una reforma profunda, por este motivo es que levantaremos un plebiscito, en donde los chilenos decidan la educación que quieren.

      El camino hacia una reforma estructural de la educación está lleno de obstáculos y dificultades, estamos convencidos de que sólo la estrategia de la unidad nos permitirá recorrerlo en su totalidad y con éxito.

CONFECH